BBN Radio
Cómo Ir Al CieloRadioInstituto BíblicoChatRecursosIdiomasDonacionesContáctenos
Inscribirse|Acceso a los Cursos|Ayudas a sus Preguntas|BI Ayuda de Audio|Quienes somos|Herramientas|Testimonios|
Datos de ingreso
Entrada del estudiante
nombre del usuario:
Contraseña p/este sitio:


¿olvidó su contraseña?
¿olvidó su usuario?
No es un estudiante aún
Ningún regalo es mejor que Cristo mismo

¡Gracias a Dios por su don inefable! —2 Corintios 9:15
Durante la época de Navidad, una publicidad de televisión que me gusta muestra a dos vecinos que compiten amigablemente para ver quién transmite mejor el espíritu navideño. Cada uno mira con atención mientras el otro decora su casa y los árboles con luces. Después, va mejorando su propiedad para que luzca mejor que la del otro. A continuación, empiezan a competir sobre quién da regalos entre los vecinos de manera más extravagante, corriendo alegremente mientras los reparten.
El pueblo de Dios no está compitiendo para ver quién da más, pero se nos llama a ser «dadivosos, generosos» (1 Timoteo 6:18). El apóstol Pablo instruyó a la iglesia de Corinto: «Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre» (2 Corintios 9:7).
Durante la época navideña, mientras compartimos regalos con otras personas, recordemos cuán generoso ha sido Dios con nosotros: nos dio a su Hijo. Ray Stedman afirmó: «Jesús dejó de lado sus riquezas y entró como pobre en su creación, para enriquecernos a todos por su gracia».
Ningún regalo que demos podría competir nunca con la abundancia que hemos recibido del Señor Jesús. ¡Démosle gracias por el don inefable de Jesús! (v. 15).

Ningún regalo es mejor que Cristo mismo.

Escrito por:   Editores de Nuestro Pan Diario    Fecha de publicación  12/10/2013 4:01 PM
Número de visitantes  3943


Previo: Exhibir la Luz
Login                                                                                           Herramientas bíblicas   Derechos de autor   Privacidad