| 
             | 
            
              
                
                  |             
                  | 
                 
                
                  |             
                  | 
                              
                  | 
                 
                
                              
                 
  
    
    
      
         | 
        
       
 
      
        
	
	
		Carta al Estudiante - Marzo 2014 - issue 9
			 
		 | 
	 
	
		
			  Estudiante del Instituto Bíblico de BBN
  Hola Amigo/a: Te saludo y te deseo la más rica bendición de Dios para tu vida y los tuyos. Es un privilegio escribirte; gracias por leer este devocional, espero que su consejo sea oportuno en tu vida, y te anime a continuar en esta preciosa vida cristiana que Dios nos regala.
  DESCANSA En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará. —Salmo 23:2-3 A veces, nuestro perro se altera tanto que tiene convulsiones. Para prevenir que eso suceda, tratamos de calmarlo. Lo acariciamos, le hablamos con voz suave y le decimos que se acueste y descanse. Pero cuando oye «acuéstate y descansa», mira para otro lado y empieza a quejarse. Finalmente, con un dramático suspiro de resignación, obedece y se tira al suelo. En ocasiones, nosotros también necesitamos que nos recuerden que debemos descansar. En el Salmo 23, aprendemos que nuestro Buen Pastor «en lugares de delicados pastos [nos hace] descansar» y que nos guía «junto a aguas de reposo». Sabe que nos hace falta esa tranquilidad y descanso, aun cuando nosotros no nos damos cuenta. Nuestro cuerpo está diseñado para descansar con regularidad. Dios mismo reposó al séptimo día, después de su obra creadora (Génesis 2:2-3; Éxodo 20:9-11). Jesús sabía que había un tiempo para servir a las multitudes y otro para descansar. Instruyó a sus discípulos: «Venid vosotros aparte […] y descansad un poco» (Marcos 6:31). Cuando descansamos, nos renovamos y re-enfocamos. Si llenamos todo el tiempo con actividades, incluso con cosas válidas, Dios suele captar nuestra atención haciéndonos acostar y «descansar». El descanso es un don, una dádiva buena de nuestro Creador que sabe exactamente lo que necesitamos. Alabémosle por hacernos descansar en delicados pastos. Reflexión: Si  en ciertos momentos de la vida no nos retiramos y descansamos, podemos desmoronarnos y caer en precipicios emocionales  y espirituales. Escrito por: Editores de Nuestro Pan Diario
  Instituto Bíblico
  Cursos sugeridos:(link)
  - 21200 Guarda tu Corazón - 21700 Camino a la Restauración
  Estimado amigo, recuerda que en la página del Instituto tienes muchas ayudas para no perder tu tiempo cuanto lo dispones para el estudio, por favor lee Ayudas a sus Preguntas. Gracias por estudiar con BBN.
  Dios te bendiga Ricamente!
  
		 | 
	 
	
		
		
			
				 
				
					Escrito por:
					 
					Equipo de trabajo del BBNBI   
					Fecha de publicación 
					5/12/2014 9:04 AM 
					Número de visitantes 
					6083 
			 | 
		 
	
	 
	
		
			 
			 | 
	 
 
  | 
       
     
     | 
   
 
 | 
                 
                
                  |             
                  | 
                 
               
             | 
            
               |